Los principales riesgos y factores de riesgo asociados a los almacenamientos mediante paletizado y apilado en altura o directamente sobre el suelo, son los siguientes:
Golpes por caída de cargas y objetos sobre zonas de paso o de trabajo debidas a:
• Deficiente apilamiento o conformación de las cargas.
• Apilamientos verticales que superan las alturas máximas de seguridad.
• Sobrecarga de la pila.
• Falta de verticalidad o inestabilidad de la pila.
• Superficie de apilamiento en pendiente, con irregularidades, poco resistente, etc.
• Dispositivos de retención de cargas defectuosos o inexistentes (redes, mallas, flejes, largueros tope, etc.).
• Rotura de la paleta en mal estado o sobrecargada.
• Utilización más de una vez de paletas no reutilizables.
Sepultamiento y atrapamientos diversos por hundimiento de los niveles de carga debidos a:
• Sobrepasar los límites máximos de resistencia de los embalajes apilados.
• Desconocimiento del peso real de las unidades de carga manipuladas.
• Suelo con una capacidad portante insuficiente para las cargas que se almacenan sobre el mismo.
Atropellos y golpes por equipos de manutención debidos a:
• Inadecuado dimensionado de los pasillos o falta de señalización específica para vehículos y/o peatones.
• Falta de formación del operador del equipo de manutención.
• Falta de iluminación o iluminación deficiente en los pasillos de circulación y cruces.
Sobreesfuerzos debidos a:
• Manipulación manual de cargas inadecuada.
• Falta de equipos de manutención y medios auxiliares adecuados al tipo de cargas a utilizar.
Otros factores que pueden contribuir a la materialización de los riesgos citados son los siguientes: aumento de calor, descenso de los niveles de iluminación como consecuencia de la acumulación de los materiales, disminución de la superficie de trabajo, la ocultación o anulación de los elementos de prevención de incendios y de las medidas de emergencia.
Medidas de prevención y protección
Las medidas de prevención y protección se desarrollan al describir, por un lado medidas generales y, por otro, medidas específicas para los riesgos descritos.
Medidas generales
• Las personas que realicen el apilado y el almacenamiento deben estar correctamente formadas.
• Evitar la mezcla de distintos materiales y/o tipos de embalaje a la hora de almacenar. Las mercancías han de ser almacenadas o apiladas agrupándolas en función de su volumen y del tipo de embalaje.
• Los productos químicos deben almacenarse según su normativa específica, evitando mezclarlos con otros productos que pudieran incrementar el riesgo para los trabajadores.
• No se deben almacenar conjuntamente materiales no compatibles.
• Mantener la zona de almacenamiento libre de materiales y residuos acumulados.
• Almacenar siempre que se pueda en zonas cubiertas.
• Al almacenar materiales en zonas no cubiertas, se debe analizar como pueden ser afectados por el viento, el agua o el hielo. En el caso de que los materiales situados en la parte superior puedan ser afectados por el viento se podrían emplear lonas impermeables, ancladas al suelo que asimismo cumplirían con la función de protección frente al agua y/o nieve.
• Los materiales se deben situar lejos de aberturas en el suelo o zonas de acceso.
• Pintar las paredes o postes con rayas para indicar, mediante una referencia rápida, la altura máxima de almacenamiento. Asimismo, se recomienda indicar el tipo de material almacenado en esa zona mediante un panel de señalización visible permanentemente.
• El almacenamiento en el interior de edificaciones deberá tener en cuenta las limitaciones en altura y superficie que se establezcan para el funcionamiento de los sistemas de extinción.
• Los materiales apilados no pueden ejercer presión sobre las paredes, muros y pilares del edificio.
• La superficie de las zonas de almacenaje debe tener la resistencia suficiente para poder soportar las cargas a almacenar.
• No se debe almacenar sobre superficies con pendiente o que presenten irregularidades.
• Mantener la verticalidad de las pilas y los materiales almacenados.
• El tiempo máximo de un almacenamiento deberá tener en cuenta las características de los materiales, tipos de envase utilizados, deterioro del material y las condiciones ambientales.
• No se debe permitir escalar o subir al material almacenado o apilado, al menos que esté expresamente autorizado y se conozca su estabilidad.
Medidas específicas
Golpes por caída de cargas y objetos
Las medidas preventivas frente al riesgo de golpes, se desglosan en dos apartados, el primero trata sobre los criterios generales de estabilidad y en el segundo sobre medidas generales organizativas y de seguridad.
a) Criterios sobre estabilidad/altura máxima del apilado de unidades de carga paletizada apoyadas sobre pared. De todos los parámetros de apilado, el que resulta crítico es el que se refiere a la altura máxima de apilado. Para ello, no existen criterios estandarizados sobre la altura máxima de apilado salvo el referente a la limitación de los propios elementos de apilado y por el alcance vertical del mástil de las carretillas elevadoras utilizadas para manipularlos. A título de ejemplo, en el grafico 1, se indican unos niveles de estabilidad orientativos en base a criterios técnicos que relacionan la estabilidad con la altura para apilados soportados por paletas.
GRÁFICO 1
En el mismo se puede observar que la estabilidad está garantizada hasta apilamientos de tercer nivel, mientras que para apilamiento de seis niveles la estabilidad en prácticamente nula.
Asimismo, en el gráfico 2 se expone la seguridad del apilado en función del número de niveles para conjuntos en bloque, adosados e isla, apoyados o escalonados.
En dicho gráfico se puede ver como hasta tres niveles (color verde), el apilado es seguro, para el cuarto y quinto nivel (color amarillo), el apilado está comprometido, mientras que a partir del sexto nivel (color rojo), el apilado es inestable y tiene un máximo riesgo de desplome. Sobre la altura máxima de apilado, la norma UNE-EN 12845. “Sistemas fijos de lucha contra incendios. Sistemas de rociadores automáticos”, en relación con el diseño, instalación y mantenimiento de estos sistemas, limita la altura máxima de almacenamiento en isla o bloques hasta un máximo de 7,60 m, solo a los efectos del adecuado funcionamiento de los sistemas de rociadores de la instalación de protección contra incendios. Así mismo, se debe tener en cuenta que la altura máxima puede venir condicionada, en aquellos casos donde se disponga de exutorios para la evacuación de humos y gases de combustión en caso de incendio, por la necesidad de dejar una capa libre para la evacuación de humos. Esta capa será de al menos 0,5 m por encima de la altura máxima de apilado.
GRÁFICO 2
El factor determinante para que un apilamiento sea seguro, es el ratio altura-base de la pila. Para pilas sin apoyo, se recomienda que el ratio se de 3:1 como máximo. Para los casos en los que exista una unión buena entre los elementos de la pila y una buena fricción entre las superficies de apoyo, el ratio admisible puede incrementarse a 4:1.
b) Medidas generales organizativas y de seguridad
– Cada fila tiene que vaciarse antes de ubicar nuevo producto.
– La ubicación de productos puede ser aleatoria o fija, pero siempre por filas.
– El número de paletas por fila en profundidad, debería ser de 6 como máximo, por motivos de seguridad en el uso de los equipos de manutención.
– Los materiales según el tipo de envase y la unidad de carga formada, deben sujetarse con alambres, flejes, etc., para evitar su posible caída. Al margen de lo anterior, según los casos puede ser conveniente sujetar el conjunto a la paleta y poner cantoneras de protección
– No debe situarse personal ajeno a la operativa en las zonas próximas al apilado y desapilado.
– No se deben utilizar paletas en mal estado o sobrecargada.
– No utilizar más de una vez de paletas no reutilizables.
Sepultamiento y atrapamientos diversos por hundimiento de los niveles de carga
– La resistencia de los embalajes apilados debe estar acorde al peso conjunto de las unidades de carga que va a soportar para todos los niveles previstos.
– Conocer el peso de las unidades de carga antes de proceder a su apilado.
– Se debe comprobar y en ningún caso superar, la capacidad portante de la zona de almacenamiento.
Atropellos y golpes por equipos de manutención
Las medidas preventivas para controlar este riesgo pasan por un adecuado diseño del almacén, señalización y uso adecuado según los procedimientos establecidos y la formación adecuada de los operadores.
1. Diseño y uso de los almacenes
– En el diseño de los almacenes se debe tener en cuenta que los pasillos entre cargas debe tener la anchura suficiente para permitir el paso y las maniobras necesarias de los equipos de manutención utilizados con su carga. En el cálculo se debe considerar incrementar la anchura alrededor de un 10% de margen entre cargas.
2. Señalización. Orden y limpieza
– El almacén debe estar dotado, siempre que sea posible, de área(s) específica(s), debidamente señalizada(s), para la preparación de los pedidos y el acondicionamiento de las cargas. No obstante, en el caso en que se deban realizar trabajos de confección y separación de cargas (picking) en los pasillos, antes de comenzar los trabajos se señalizará adecuadamente la zona y sus accesos para evitar que se produzcan accidentes. En este sentido puede ser útil el contenido de la NTP 434 sobre superficies de trabajo seguras.
– Cualquier cambio en la ubicación de las zonas de almacenamiento, debe comportar obligatoriamente un nuevo cálculo del diseño de la distribución de cargas y la aprobación de las nuevas condiciones dentro de la organización de la gestión del almacén, así como su señalización y medidas complementarias, con objeto de evitar confusiones.
– Los pasillos y las zonas de almacenamiento deben mantenerse libres de objetos y limpiarse periódicamente, especialmente después de cualquier derrame o caída de la carga o parte de la misma.
– En lo relativo al orden y limpieza se deberán seguir los criterios indicados en el Anexo II del Real Decreto 486/1997, sobre utilización de lugares de trabajo y lo recogido en su Guía Técnica de desarrollo.
– Igualmente, la señalización de los almacenes deberá cumplir con el Real Decreto 485/1997, sobre señalización y salud en el trabajo y lo recogido en su Guía Técnica de desarrollo.
3. Circulación
– La velocidad de los equipos de manutención debería estar limitada a 10 km/h.
– No circular marcha atrás sin señalizar y en caso necesario utilizar la ayuda de otro operario.
– La circulación por rampas (en vació/carga), debe realizarse de acuerdo con las instrucciones del fabricante.
– El descenso por pendientes marcha atrás.
– No girar sobre rampas.
4. Pasillos de circulación
– En cumplimiento de las exigencias del RD. 486/1997, cuando se precise, las zonas de paso de vehículos y peatones deberán diferenciarse, respetando las dimensiones necesarias para cada tipo de usuario, con especial atención en los cruces para que los ángulos de giro de vehículos y la visibilidad sean correctas. Se colocarán espejos de visualización estratégicamente orientados siempre que sean necesarios.
– Los pasillos de servicio y circulación de las carretillas así como los pasillos peatonales deben mantenerse libres de obstáculos.
– No se deben realizar almacenamientos, aunque sea transitoriamente, en los pasillos de circulación, obstruyendo las salidas de emergencia o el acceso a los medios de extinción de incendios.
a) Pasillos de circulación. Dimensiones:
– Pasillo de sentido único: la anchura total de la carretilla o de la carga (la que sea mayor) más 1 m.
– Pasillo de doble sentido: el doble de la anchura de la carretilla o de la carga (la que sea mayor) más 1,40 m.
– Los pasillos de servicio tendrán una anchura suficiente para permitir el tránsito seguro de las carretillas.
b) Zonas de paso de peatones
– En la medida de lo posible, el tráfico de peatones debe separarse del tráfico de carretillas. En caso contrario, se debe mantener una holgura mínima de 0.50 m al menos, en uno de los lados.
– Los pasillos peatonales ubicados en las vías de circulación de carretillas de manutención tendrán un ancho mínimo de 1,20 m en pasillos principales y 1 m en pasillos secundarios y estarán debidamente señalizados. Es aconsejable dotar a los pasillos peatonales de barandillas separadoras.
– Debe prohibirse el paso de personas por los pasillos de servicio y, si excepcionalmente se hace, se debe señalizar la prohibición de acceso para vehículos de manutención. Se debe prohibir el acceso de personal foráneo a las áreas de almacenamiento.
– Deben extremarse las precauciones en los cruces de los pasillos, mediante señalización y medios que faciliten la visibilidad, por ejemplo, mediante el uso de espejos.
– Los pasillos, tanto los de servicio como los peatonales, y las zonas de almacenamiento deben quedar claramente
5. Iluminación
Las distintas zonas de trabajo deberán disponer de los niveles de iluminación, en función de las exigencias visuales requeridas de acuerdo con lo indicado en el RD. 486/1997, en su Anexo IV.
Sobreesfuerzos por manipulación manual de cargas
En la manipulación manual de cargas se deberán seguir los criterios indicados en el RD. 487/1997 relativo a la manipulación manual de cargas y lo recogido en su Guía Técnica de desarrollo.